lia engel

Mi esposa y yo rompimos después de cinco años de estar juntos. La única razón por la que esta relación duró tanto fue por esas noches calurosas que tuvimos. Normalmente no nos llevábamos nada bien. En lo único en lo que podíamos estar de acuerdo era en sexo. No podíamos ponernos de acuerdo en todo excepto en el sexo, discutíamos constantemente y, finalmente, estas discusiones nos desgastaron y nos divorciamos. Nunca lo había visto durante más de un mes después del divorcio. No era que no extrañara esas noches calurosas que teníamos, pero ya había terminado. Yo era fabricante de muebles. Un día llegó una llamada telefónica y llamó un cliente. Él tenía un trabajo de gabinete de cocina, y fui a la dirección dada para tomar medidas. Me quedé conmocionado cuando fui a la dirección dada. Mi ex esposa me dio la bienvenida. Resulta que el armario que voy a hacer estará en su casa. Me sorprendió mucho, pero ocultando mi sorpresa, me concentré en mi trabajo. Mientras tomábamos medidas, por un lado, por otro lado, mi ex esposa y yo comenzamos a hablar. Después de charlar un rato, no pude soportar decir que extraño esas noches que viví contigo. Nunca le mentiré a mi ex esposa, así que extraño esas noches, así que solté el medidor y comencé a acurrucarme con mi ex esposa y me aferré a sus labios. Después de besarme un rato, mi ex esposa me llevó al dormitorio y me dijo que nos fuéramos a la cama. Después de desnudarnos haciendo el amor de pie, nos fuimos a la cama.

Mi ex esposa, que tomó mi polla en su mano, comenzó a lamerla, diciendo que la extraño mucho. Era obvio por su apetitoso lamido que realmente extrañaba mucho. Después de lamer por un tiempo, no he estado follando durante un mes, estaba tan cachonda que se acostó en la cama diciendo que me follara más. Comencé a lamerlo aferrándome a ese coño que anhelaba. Era como en los viejos tiempos. Después de disfrutar lamiendo su coño por un rato, entré y comencé a follar. cuando entré y entré, mi exmujer decía, eso es genial, te amo. Estaba volviendo locos de placer tanto a mí como a mi ex esposa al procesar su hermoso coño casi como una máquina. Entonces mi ex esposa tomó el control y salió en mi regazo y comenzó a frotarse y saltar en mi regazo. Después de saltar un rato, había alcanzado las cimas del placer y dije que me iba a correrme de mi regazo. Qué pasará además de esto, soy tu ex esposa, creo que tuve un alivio increíble al vaciarme en mi amor. No nos hemos vuelto a casar desde entonces, pero seguimos follando de vez en cuando. Dic.